Una vez terminada la novela de Miquel Sanchis, su primera novela, espero con cierta ansiedad que nos brinde la oportunidad de conocer más historias suyas.
Quisiera que fuera una reseña muy especial, como especial es su autor, despertar en los demás ese sentimiento que ha despertado en mí al leerla, y juntos, llegar a poder cambiar el mundo, con espíritu crítico y combativo, como su protagonista principal.
‘No fue un bolero de amor’ abarca múltiples géneros: desde el drama al terror, pasando por cierto humor negro, el cual sólo seríamos capaces de permitírselo a nuestra Sole, antes Soledad.
Buscando ser convincente en mis argumentos, utilizando para ello un elemento exterior, gracias al cual llegué en su momento a conocer a “Miki”. Desde hace unos meses nos seguimos por las redes sociales, habitualmente facebook, y utilizando este elemento me he dado cuenta a raíz de la publicación de su novela, y en las distintas presentaciones, que su público es mayoritariamente, y por no decir en su totalidad, femenino; cosa que celebro, nunca dudé de la superioridad del género.
Dicho lo cual, aprovechando la reflexión, hablemos de mí.
Cuando veo al autor, en las citadas presentaciones, rodeado de entusiastas seguidoras, quiero gritarle al mundo que yo soy una de ellas, sí yo: un hombre hétero, padre de familia, luchando con los micromachismos que, con el tiempo, quedaron instalados en mí. En la novela se habla de: feminismo, amistad, sensibilidad y maternidad; sería un monstruo si no logro empatizar con estos sentimientos; un monstruo como Javier: machista, misógino y violento, el otro protagonista.

Volvamos al autor, y a su obra, es encomiable la generosidad brindada para sus autores más admirados, lugares y seres queridos, a los que no duda en darles su espacio dentro de ella. Generando así un «libros dentro de libros» que tanto nos gusta a los lectores.
Para ir acabando, no quisiera enrollarme más, pienso que ya he sido suficientemente claro, la he disfrutado como si de una novelette para machitos de «espada y brujería» se tratara. Y esperando que ‘No fue un bolero de amor’ no guarde ninguna relación con situación alguna vivida por su querido escritor.
